A pocas personas les dirá algo este nombre, solamente a su familia, a algunos compañeros de Facultad y pocos más. Murió joven, estudiante licenciado en historia y como tantos otros
sin trabajo, su padre enfermo, su madre diabética con tres hermanos y dos hermanas menores, el hacía de cabeza de familia, para mantenerlos vendía sus preciados libros, solo se quedó con un ejemplar antiguo de Moby Dick, en versión original para practicar su inglés, soñaba con casarse y empezar una nueva vida en Canadá. Mientras esperaba que su suerte cambiara y conseguir un trabajo acorde con su capacidad, vendía frutas en el mercado, hasta que el despotismo de un agente le decomisa la fruta sumiéndole en la más profunda miseria, y ante la impotencia por la acción arbitraria de la policía, sin crédito para poder reponer el género decomisado, tras varios días de pensar una solución para mantener a su familia y no perder la esperanza en el futuro, se rinde, y en su desesperación se inmola el 17 de diciembre del 2010 en la ciudad que le vio nacer, Sidi Bouzid, fue el inicio de una protesta generalizada en Túnez que tomó el nombre de La Revolución del Jazmín. Sigue leyendo
Contador de visitas
Webs amigas
Etiquetas









